ORIGENES DEL ROCK SINFONICO
El llamado Rock Sinfónico o Rock Sinfónico
y Progresivo tiene sus orígenes a mediados de los '60, cuando se combinó el
rock'n'roll con elementos de la música docta, la psicodelia, y la
disponibilidad de nuevas técnicas de grabación.
Todo este sincretismo musical nace
fundamentalmente en el Reino Unido, al influjo de una nueva etapa compositiva
de The Beatles, quienes utilizando la
grabación multipista, podían multiplicar los tracks, que posteriormente eran
“mezclados”. Esto le dio la posibilidad
de incluír orquestaciones, además de salir del típico formato de “canción”. En “Sgt Pepper´s Lonely Hearts Club Band” cada
canción es una parte de un todo, llegando a la idea de album conceptual. Un
paso más es la película “Magical Mystery Tour”,
que cinematográficamente fue un total fracaso, pero que musicalmente se adentró
más en lo conceptual, expandiendo el horizonte sonoro y compositivo. Aquí se
utiliza el Mellotron, un sintetizador de sonidos análogo, producido por cintas
grabadas, y que como posteriormente los sintetizadores de osciladores creados
por Robert Moog cambiarían el típico set instumental de la música pop.
En 1967, la banda de R&B británica “The Moody Blues”, es contratada para realizar un
proyecto diferente, con el fin de
mostrar mediante la grabación de un album, la última tecnología en audio,
dirigida a los melómanos del mundo: el campo stereo cuadrofónico.
El productor Tony Clarke pretendía hacer una adaptación de la “Sinfonía Nuevo Mundo” de Antonin Dvörak, mezclándola con el rock, el blues, o sea la música de moda, para añadirle así la “psicodelia” propia de esa década prodigiosa. Se edita entonces “Days of Future Passed” con la participación de la London Festival Orchestra, una obra considerada un mojón importante para el desarrollo del rock sinfónico, que los críticos de música, consideran como la directa precursora del rock progresivo.
Pronto aparecen otros discos en la misma
dirección, la conceptualidad de la obra y el aditamento de partes interpretadas
por una orquesta completa. Se destaca el “Concierto
para Grupo y Orquesta” de Jon Lord, presentado en el Royal Albert Hall
el 24 de setiembre de 1969, e interpretado por Deep
Purple y la Royal Philarmonic Orchestra, dirigida por el gran
maestro Malcolm Arnold y la obra cuasi teatral “Tommy”,
una suerte de ópera-rock, compuesta e interpretada por The
Who.
En ese mismo año aparecen dos discos que
mezclaban el rock, jazz y la música culta en una atmósfera psicodélica lograda
a traves de órganos y sintetizadores, que ampliaría el panorama: “In the Court of
the King Crimson” del
grupo homónimo y “The Aerosol Grey Machine”
de Van der Graaf Generator. La corriente
denominada “progresiva” iba sumando bandas y
adeptos. No puede soslayarse la
aparición de los nuevos trabajos de Pink Floyd
con “Ummagumma” y “Atom
Heart Mother”, discos enteramente conceptuales donde abundan las partes
instrumentales y ambientes psicodélicos creados esencialmente por Wright.
En 1970 aparecen uno de los grupos icónicos
del rock sinfónico. Emerson, Lake & Palmer,
sacan a la luz su disco homónimo, donde ya se incluían adaptaciones y
transcripciones de piezas cultas. Así el
“Allegro Bárbaro” de Bèla Bartok es transformado en “The
Barbarian”, y también se incluye la “Sinfonietta” de Leo
Janicek en “Knife Edge” y la Invención No. 1 de
J. S. Bach
en “Take a Pebble”. En
éxito masivo del sencillo “Lucky man” le dio la oportunidad a la banda de
difundir ampliamente su música logrando gran aceptación en todo el mundo.
1971 es un año clave: Primero por la aparición del sencillo de Led Zeppelin, Stairway
to Heaven, en el que se recurre a algunas piezas de la música profana
agregándole tintes barrocos. Esencialmente es un tema de rock sinfonico por su
estructura con adecuados arreglos y excelente uso de las voces instrumentales.
Además este año las dos bandas que mejor
definen el movimiento como Yes y Genesis sacan a la luz dos obras de gran
importancia como Trespass y The
Yes Album . El primero no tan popular como el segundo aunque ambos como un
modelo del naciente género.
1972: El álbum “Fragile” de Yes realiza un gran aporte al estilo.
Por un lado el tema Heart of the Sunrise
es un conjunto de arreglos y una melodía sobre una vanguardista pieza del jazz
que se enriquece tanto como para no saber ya quien es el autor. Este tema nos
anuncia la absoluta importancia de la métrica, los ritmos irregulares y el
modelo stravinskiano. Finalmente el resto de los temas ejecutados con un
“estilo” de jam, fusionan efectivamente el jazz, el impresionismo y el rock,
con algún aditamento barroco.
Tanto Yes como Genesis son dos de los
mayores representantes del estilo, innovando y
desarrollando la paleta sinfónica dentro del rock. Con sus siguientes
albumes, “Close to the Edge” y “Foxtrot” respectivamente, ya no sólo incluyen a la música docta dentro de la
canción rock, sino que al revés, incluyen a la canción dentro de la música
docta.
Este es finalmente el concepto que le da
vida al rock sinfónico y lo catapulta a la cúspide dentro del amplio panorama
sonoro y creativo de la música del SXX.
De cualquier manera, no parece haber un
límite exacto entre el rock psicodélico,
el progresivo, el llamado Art Rock y el rock sinfónico, ya que tienen
elementos comunes, tanto temáticos como musicales, y prefiero hablar más de un
desarrollo, de una evolución, que de un encasillamiento.
Podemos con este criterio amplio considerar
algunas obras imprescindibles de los comienzos del rock sinfónico y progresivo:
“To our children's
children´s children” de los precursores “The Moody
Blues”, un encumbrado trabajo melódico, sustentado en el Mellotron con la bella
melodía “Eye of Child”; sin dudas el nombrado “Close
to the Edge” de Yes, una de las obras musicales más grandes de la
historia del rock, con su temática religiosa y su forma claramente sinfónica.
Ya mencionamos el “Foxtrot”
de Genesis, en la era
Gabriel, con “Supper´s Ready” como un tema imprescindible del
género, y se podrían agregar los albumes “Selling
England by the Pound” o “The Lamb lies down
on Broadway”. Dos obras maestras
de ELP como “Tarkus” y
“Brain Salad Surgery”; la brillante composición de Rick
Wakeman quien en 1974 le pone música a la novela de Verne “Voyage to the Center of the Earth”: se pueden
citar “Aqualung” y “Thick
as a brick” de Jethro Tull, aunque
Anderson niegue que fueran albumes conceptuales; y no podemos dejar de
mencionar a “Wish you Were Here” y “Animals” de Pink Floyd con sus notables climas
sonoros.
Algunos dicen del rock sinfónico, (parafraseando
a Gustavo Bolasini de El Retorno del Gigante) que es un género musical que
seguramente te va a gustar, si pudieras escucharlo. Y creo que razón les asiste, así que desde el
blog de DRAMA, te invitamos a disfrutar del
mismo. No te vas a arrepentir.
Marcio Gomes.
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